Carta a la defensa de los videojuegos

A quien pueda interesarle.

El 17 de octubre de 2021, el presidente de México ─Andrés Manuel López Obrador─ comentó en su mañanera que los videojuegos son un gran daño a la población infantil mexicana; mencionó que a los niños se les deben fomentar los valores familiares, morales y espirituales; que para eso se debe dejar de lado el “Nintendo” (haciendo alusión a los videojuegos).
 
“Que no estén tanto tiempo sometidos a los aparatos electrónicos [ya que] están horas los niños viendo el Nintendo y ahora juegos violentos que no deben de ser visto por los niños”, señaló el presidente.
 
Cabe destacar que esto no es un ataque para desprestigiar al líder del Poder Ejecutivo del país. Desde que inició este medio de entretenimiento, los videojuegos han sido catalogados como “cosas de niños”; a pesar de que había juegos para todas las edades.
 
Un caso de alboroto de este medio fue con la salida de Mortal Kombat para las arcades (o maquinitas), el Sega Genesis y el Super Nintendo; mucha gente se escandalizó cuando este título salió a la venta, ya que contenía violencia explícita, para ese entonces.
 
Esto provocó la creación de la Entertainment Software Rating Board (ESRB), este organismo es el encargado de clasificar los títulos que muchas desarrolladoras que quieren sacar sus juegos al mercado; esto permitió que fuese más fácil saber para qué público estaban destinados estos videojuegos. En México es la clasificación que se usa para las películas.
 
Otro tema que me gustaría abarcar es la responsabilidad de los padres de familia. Cabe aclarar que esto no es una llamada de atención; algunos padres se dejan llevar por las opiniones de los pequeños y ello provoca que compren los juegos que no son propios para su edad.
 
Los padres de familia deben estar conscientes de los gustos de sus hijos y de los contenidos que lleguen a consumir. La ESRB marca en los empaques de los juegos su clasificación; ya si el responsable del pequeño decide comprar el título que no es acorde con la edad, es su responsabilidad. 
 
Y, por último, me gustaría tocar los beneficios que tienen los videojuegos sobre los pequeños. Algunos estudios han demostrado que una de las ventajas es el aprendizaje de idiomas, esto permite la comunicación de los jugadores alrededor del mundo. Además, de que los juegos vienen en su idioma original (inglés o japonés) en la mayoría de los casos.
 
Loa juegos fomentan la imaginación de los pequeños del hogar, un ejemplo sobre este beneficio sería Minecraft; el título cuenta con un modo creativo que permite construir cosas dentro de un mapa.
 
No culpemos a los videojuegos por todo lo malo de la sociedad; se debe poner límites a la hora de dejar a los pequeños usar este medio de entretenimiento.
 

Atentamente.
 
Omar Razo Morúa
Editor de “Los Noob más Mancos”.